La Religión: Frases y Textos Seleccionados - Página 3

Pero dado que el universo era un tanto caótico, era obvio que el Ser Supremo no lo había creado. Si lo hubiese creado, siendo Supremo, habría hecho un trabajo mucho mejor, pensando las cosas bastante más... O, para decirlo de otra manera, la existencia de un reloj mal montado probaba la existencia de un relojero ciego. Solo tenías que mirar alrededor para ver que se podían introducir mejoras en todas partes.
Esto sugería que el universo probablemente había sido montado con cierto apresuramiento por un subordinado mientras el Ser Supremo no estaba mirando.

Mi punto no es que la religión es el motivo de guerras, asesinatos y ataques terroristas, sino que la religión es la etiqueta común a muchas de estas y la más peligrosa también. Es la razón por la que existen "ellos" en lugar de "nosotros" en muchos de estos actos reprochables.

Bush y Bin Laden están realmente en el mismo lado: del lado de la fe y la violencia contra el lado de la razón y la discusión. Ambos tienen una fe implacable de que tienen razón y el otro es malvado. Cada uno cree que cuando muera va al cielo. Cada uno cree que si pudiera matar al otro, su camino al paraíso en el otro mundo estaría aun más asegurado. La delirante idea del "otro mundo" es bienvenida en la mentalidad de estos dos sujetos. Irónicamente "este mundo" sería un lugar mucho mejor sin ninguno de ellos.

Muchos de nosotros veíamos a la religión como una tontería inofensiva. Puede que las creencias carezcan de toda evidencia pero, pensábamos, si la gente necesitaba un consuelo, ¿dónde está el daño?. El 11 de septiembre cambió todo eso. La fe revelada no es una tontería inofensiva, y por el contrario puede ser una tontería letalmente peligrosa. Peligrosa porque da a la gente una confianza inquebrantable en su propia justicia. Peligrosa porque les da el falso coraje de matarse, lo que automáticamente elimina las barreras lógicas para matar a otros. Peligrosa porque les inculca enemistad a otras personas etiquetadas únicamente por una diferencia en tradiciones heredadas. Y peligrosa porque todos hemos aceptado ese extraño respeto que protege únicamente a la religión de la crítica normal.

Un ateo es alguien que siente acerca de Yahvé lo que cualquier cristiano decente siente acerca de Thor, Baal o Isis. Como se ha dicho antes, todos somos ateos de la mayoría de los dioses que la humanidad ha creído/creado alguna vez. Algunos de nosotros sólo vamos un dios más allá.

A los dioses no les gusta que las personas no trabajen mucho. Las personas que no están ocupadas continuamente pueden empezar a pensar.

Me alegró saber que él (Juan Pablo II) no se había percatado de que había presentado una ponencia en la que teorizaba sobre cómo empezó el Universo. No me hacía gracia la idea de ser entregado a la Inquisición como Galileo.

La religión se basa, pienso, principal y primariamente en el miedo. El miedo es el padre de la crueldad, y por tanto no es sorprendente que crueldad y religión han ido tomadas de la mano. La ciencia puede ayudarnos a superar este cobarde temor en que ha vivido la humanidad por tantas generaciones. La ciencia puede enseñarnos, y yo pienso que nuestros propios corazones pueden enseñarnos, a dejar de buscar apoyos imaginarios, a dejar de inventarnos aliados en el cielo, sino mejor a mirar a nuestros propios esfuerzos aquí en la tierra para hacer de este mundo un lugar más adecuado para vivir, en vez de la clase de lugar que las Iglesias han hecho de él durante todos estos siglos.

Existe una diferencia fundamental entre ciencia y religión. La religión se basa en la autoridad, y la ciencia se basa en la observación y la razón. La ciencia vencerá porque funciona.

El catecismo me enseñó, en la infancia, a hacer el bien por conveniencia y a no hacer el mal por miedo. Dios me ofrecía castigos y recompensas, me amenazaba con el infierno y me prometía el cielo; y yo temía y creía. Han pasado los años. Yo ya no temo ni creo. Y en todo caso, pienso, si merezco ser asado en la parrilla, a eterno fuego lento, que así sea. Así me salvaré del purgatorio, que estará lleno de horribles turistas de la clase media; y al fin y al cabo, se hará justicia.